viernes, 20 de febrero de 2009

Consejos de las abuelas japonesas


Protege tu piel del sol.

Bebe agua mineral, respira aire puro y vive en una casa limpia.

Según te vayas haciendo mayor, no envidies aquello que florece en primavera.

Para tener una piel suave y brillante, preocúpate por ella lavándola y mimándola a diario.

Una buena piel viene de un cuerpo sano; por lo tanto asegúrate que comes comidas que purifican el cuerpo.

Comete las pieles y cortezas de las frutas y vegetales.

Demasiado maquillaje contamina la piel.

Si tienes una mala piel de herencia, puedes cambiar su condición a través de una alimentación sana.

Duerme por lo menos ocho horas cada noche y acuéstate antes de las once.

Enamórate.

Se activa. Haz deporte. Disfruta de tu vida.

No te pases el tiempo preocupada.

Controla tus deseos. No siempre quieras lo que no puedes tener. Los hábitos de deseos insatisfechos afean una mujer.

Acepta tu edad y los cambios en tu belleza. Una mujer mayor preciosa, es preciosa ya que su mente y espíritu son sabios y están llenos de gracia.

A la edad de cuarenta, la mente se hace visible en la cara.

Hazte un masaje facial a diario para prevenir arrugas y manchas de la edad y para mantener la piel fresca y elástica.

Si tienes cansancio debido al estrés, debes hacer ejercicio.

Come una amplia variedad de comida.

No te quejes. No tengas envidia. No te irrites. Tu salud se deteriorará y tu piel se resentirá.

Si tus hombros están tensos o duros, tendrás líneas y arrugas en tu cara. Date masajes.

Disfruta de la naturaleza. Estate tranquila y en paz. Come comidas sencillas.

Puedes reafirmar tu piel con masajes: cara, cabeza y cuello.

Si respiras hondo, estarás más sana y fuerte, y por lo tanto más atractiva.
Todo el mundo tiene arrugas, pero trata de evitar las arrugas controlando tu mente y tus emociones. Las arrugas son un reflejo de tus pensamientos y sentimientos.

Piel limpia, y no maquillaje, es el secreto de una piel radiante.

Si solamente limpias, hidratas y masajeas tu piel, tendrá una buena apariencia.

miércoles, 18 de febrero de 2009

Lifting Facial con Acupuntura


La belleza y todo lo que ello conlleva siempre ha sido una preocupación inherente al ser humano. De todas las culturas y de todas las épocas nos han llegado y nos siguen llegando textos, técnicas y productos destinados a mejorar y realzar nuestra figura externa.

Desconocido por la gran mayoría, la Medicina Tradicional China lleva cientos de años investigando y aplicando sus formulas milenarias en el campo de la belleza. Formulas fitoterapeuticas, técnicas de Tui Na (masaje Chino) y tratamientos acupunturales se llevan a cabo a diario en los hospitales chinos, considerándose la cosmética una especialidad clínica.

El efecto que nosotros occidentales perseguimos con cremas, masajes y operaciones estéticas es igualmente buscado por los orientales, salvo que los caminos son sustancialmente distintos. El programa de rejuvenecimiento facial acupuntural (también llamado lifting facial acupuntural) es una terapia única diseñada para reducir, minimizar y corregir las evidencias visuales del envejecimiento así como tratar de forma personalizada las causas y manifestaciones del proceso de envejecimiento que se manifiestan de forma única y distinta en cada persona.

Para conseguir esto, cada cara es analizada y estudiada de manera individual pautándose junto con el paciente las zonas a tratar. Algunas personas necesitaran más trabajo en las arrugas de la frente mientras que otras querrán minimizar las arrugas naso labiales o realzar sus pómulos. En cualquier caso, no existe un tratamiento estándar. Cada persona y cada cara son únicas.

Una vez se ha establecido un protocolo de actuación, se insertan en la cabeza, cara, cuello, oreja y algunos otros puntos corporales unas finas agujas. Las agujas empleadas son de las más finas del mercado, asegurando así una inserción no dolorosa así como una máxima precisión.

Si bien algunos puntos utilizados corresponden con puntos de acupuntura, la mayoría de los que se utilizan son específicos de este
tratamiento y ampliamente desconocidos por la mayoría de los acupuntores ya que su uso es exclusivo al campo de la belleza facial,
como lo son también las técnicas de inserción y de manipulación de
las agujas.

Es importante en un lifting facial acupuntural saber que el exterior refleja el interior y que debemos actuar y tratar consecuentemente. Es por ello que paralelamente mientras trabajamos la cara, nos enfocamos también en el resto del cuerpo para lograr un máximo equilibrio interno/externo.

La terapia se apoya con una serie de masajes que potenciarán el efecto de las agujas. En algunos casos, el paciente también podrá realizar en su casa una serie de manipulaciones destinadas a reforzar
el tratamiento. Aunque no indispensable, siempre es conveniente combinar el tratamiento con algo de fitoterapia (administración de plantas) y consejos dietéticos.

En comparación con una operación de estética, podemos decir que el lifting facial acupuntural es una perfecta y saludable alternativa. Para empezar no alcanza los altos precios que comandan este tipo de operaciones. Segundo, es absolutamente indolora y natural, no exponiéndose el paciente a los peligros y efectos secundarios de una intervención quirúrgica, ni al periodo de recuperación que suele preceder a este tipo de operaciones.

En cuanto a la duración del tratamiento, por lo general no se suelen pautar sesiones individuales de lifting facial acupuntural sino ciclos completos. Cada ciclo consiste en una serie de 12 tratamientos. Los efectos, pese a ser visibles desde los primeros días, se asientan de manera duradera a partir de la 7ª sesión y permanecen visibles entre 5 y 10 años.

Por ultimo señalar que el lifting facial acupuntural no tiene grandes contraindicaciones. En principio no se debe administrar a personas hipertensas, diabéticas, con problemas de coagulación sanguínea, o gente que padece migrañas.